La Cruzada de Fátima episodio 22: "Regreso a casa"

Con esta edicion recibe tu figura de acción de Destroyer!!

Fátima Myson y Messy dejaron la mansión de la luz para penetrar en la gran ciudad capital la cual estaba bajo una terrible oscuridad y amenazada por el caos y la anarquía.

En medio de la oscuridad de la gran ciudad, un vehiculo avanza entre la soledad de las calles. Muchas de las casas estaban marcadas en su puerta con una cruz hecha con sangre de cordero. "Protejan a sus hijos!¡Que los demonios se llevaran a los suyos y los devoran, al igual que me paso con los míos!" Repetía un hombre loco sin cansancio, mientras que pintaba cada entrada a la cual llegaba.

"No es raro que allá mucha gente este oculta en sus hogares y los que están afuera son solo locos y los delincuentes" Decía Myson mientras que seguía adelante esquivando varios autos y autobuses en llamas. En algunos se podían ver gente atrapada en su interior consumiéndose por la furia del fuego.

"Si seguimos de frente por esa avenida en treinta minutos llegaremos a la residencia donde vivo" Decía Fátima indicando a Myson por donde llegar. Con las indicaciones correctas el vehiculo ya solo estaba solo tres calles del lugar. Pero al dar vuelta en una esquina, descubrieron que toda la pista estaba bloqueada por postes de luz que fueron derrumbados  apropósito por alguien, o por algo.

"¡OK chiquilla!¡Aquí se acabo el viaje!..¡Nos vamos directamente a la estación de policía!" Dijo Myson  presintiendo que algo peligroso podría estar al rededor. Inmediatamente Fátima salto por la ventana y corrió del auto "¡Son solo tres calles!¡No pasara nada!" El oficial salio del vehiculo al ver el acto irresponsable de la joven  "¡Messy ve por ella!" grito el detective molesto."¡Ella es muy rápida!" respondió su compañero. 

Lo jovencita corría a tal velocidad que Sepukku su mascota, tenia que agarrarse fuertemente de su ropa para no caerse. Afortunadamente una potente luz de luna iluminaba el camino a la chica, la cual ya estaba a unos pasos sus residencia. Le impresiono verla intacta desde la fachada, ella recordaba que su padre tenia la suficiente cantidad de armas como para poder defenderse en caso de un asalto o secuestro."¡Papa!¡Mama!¡Dieguito!¡Estoy a salvo!" Gritaba Fátima a viva voz.

Ante los fuertes  gritos  de  Fátima  solo  recibió  una  enorme  bola  de  hierro  como respuesta."¡¡Chiquilla a tu derecha!!" La joven salto rápidamente con un doble giro en el aire, esquivando la demoledora esfera llena de puntas. "¡HaHaHa!¡ Ya tenemos otra chica para el nuestro prostíbulo muchachos!" Gritaba un joven de aspecto maleado, de cuerpo delgado pero con músculos macizos. Que tenia   una larga y brillosa cadena cromada al rededor de su cintura, con lo cual controlaba su arma principal.

El vestía un camiseta rallada con franjas rojas y blancas. Poseía tenia en su cabeza una gorra pasada de moda que le tapaba a pesar de no ser tuerto."¡Mi nombre es Pepo!¡Soy el cabecilla de los desgraciados de villa del sur y tu eres parte de nuestra propiedad flaquita!" inmediatamente Fátima se vio rodeada por mas de treinta pandilleros todos con la cara tapada con un trapo de color crema. En sus manos usaban como armas piedras palos y tubos de acero.

"¡HAHAHA!¡Esa arrogancia y esa mirada me hace acordar a un pobre perdedor al cual tengo guarda espaldas!" Se reía Fátima sin tomar en serio la fuerza de su adversario."A Flaca entonces tu has de ser de mala vida no me digas que conoces a uno de nuestra pintoresca sociedad" dijo Pepo mientras que levantaba su enorme bola de hiero."¡No se si tu  lo conozcas a uno que se llama Yunque!" Dijo la joven con mucha confianza. Todos los miembros de la pandilla se quedaron con la boca abierta al oír ese nombre.

Myson y Messi se pusieron en ese momento junto a Fátima y sacaron sus armas apuntando a los lados "¡No se has una tonta!¡Solo los estas provocando vámonos antes de que suceda una desgracia!" dijo el oficial superior a la joven "Solo necesito entrar a mi casa para saber si están bien y nos largaremos de aquí" Le respondió la chica, el policía le contesto "Si no nos vamos por las buenas tendré que arrestarte"

En ese instante Pepo sonrío a la joven y le contesto "¡Yunque yo conozco a ese pobre diablo!¡Ese tipo es un traumado!¡El vivía en una casa donde solo había choros y marcas, un día que salio ese infeliz a la calle y lo rete a una pelea" En esos momento se comenzó a recordar de esa experiencia que ambos delincuentes habían tenido al enfrentarse.

Pepo recordaba cada golpe que le brindaba a Yunque en una pelea desigual, ya cuando el segundo se adelantaba y trataba de derrotarlo, algún miembro de su pandilla se metía y le propinaba un fuerte golpe en la espalda que lo tiraba al piso. "¡DESGRACIADO!¡¡CUANDO VAS APRENDER A PELEAR SOLO!!" Gritaba mal herido el compañero de Fátima.

"¡El perdió humillado y reconociendo mi poder!¡Pero como el imbecíl es vez no tenia nada para quitarle y mostrarlo como trofeo, te tomare a ti flaca y me cobrare los intereses contigo ¡HAHAHA!" Gritaba Pepo mientras que tan solo con un movimiento de su brazo elevo la bola de hierro lo mas alto posible, para devolverla contra el piso con una fuerza tal, que la onda expansiva empujo al trío lo mas lejos posible. "¡Pandilla maten a los pendejos y tráigame a la muchacha!"

Los malandros se lanzaron contra nuestros héroes, Myson se levanto rápidamente y le ordeno a Messi a que dispare a matar, El detective saco sus dos pistolas y mato a tres mientras que su  compañero  mato a dos, hasta que un grandulón le tiro su arma de una parada y comenzaron a darse de golpes. Fátima por su parte demostró una gran agilidad en  el combate enfrentando a cada una que se lanzaba contra ella. Sepuku también daba su buena pelea ya que el se poseía de los cuerpos de sus enemigos y salía en defensa de su ama.

Fátima esquivaba rápidamente las piedras que le lanzaban los delinquentes, su protección divina estaba maximizada cada golpe destrozaba caderas y demolía las costillas  de sus adversarios. Pepo al ver la ineficacia de sus compañeros lanzo su enorme bola de hierro a gran velocidad golpeando a la joven, tirándola diez metros en la posición que  estaba. Luego el malandro con un fuerte movimiento de su brazo, elevo su arma y lo envío hacia Messi y Myson. Los cuales salieron expulsados por el impacto.

"¡HAHAHAHA!¡Soy invencible!" Decía Pepo que atacaba de nuevo a Fátima con su poderosa arma, Sepuku se atravesó usando el cuerpo poseído como barrera. El impacto fue tan fuerte que la bola morada salio expulsada, mientras que el delincuente termino completamente destrozado."¡Ya estas consiente de lo violento que puedo ser!¡Si derrote a Yunque, te puedo derrotar a ti con tan solo un leve movimiento de bola de hierro!"

Fátima se levanto molesta y luego se arrodillo, se puso en posición de  rezo y comenzó hablar en voz baja, tanto que ni se podía escuchar "¡Chiquilla deja de hacer eso, de mi ni Dios te salva!" Decía Pepo en tono burlón. La jovencita le contesto  "No estoy rezando para que dios me  salve, Estoy orando para pedirle perdón por lo que voy hacer ahora, que será tomar la justicia en mis manos..."

Inmediatamente Fátima se rodeo de un aura azul, al abrir los ojos se tele transporto detrás Pepo y le dio una patada tan fuerte que lo tiro al piso."¡Maldita mocosa te matare!" El delincuente exclamaba  mientras recuperaba su arma y la lanzaba hacia la joven. Pero la chica la esquivaba y de un fuerte golpe destrozo la dura cadena que sujetaba la bola de hierro.

"¡Mi cadena de titanio!¡Se suponía que era indestructible!¡Como una pobre chiquilla pudo hacer esto" Grito Pepo furioso y Fátima le contesto "Yo tengo la fuerza divina ya que el señor me protege y el me dio su autoridad para con mi mano parta a la mitad toda maldad y todo crimen antes de que le mundo se  acabe!" El delincuente aun así tenia otra jugada sobre la manga, dos filudas navajas que saco de sus bolsillos "!MOCOSA TE MATARE!" salto hacia ella gritando.

Fátima lo espero en tierra, al llegar el delincuente hacia ella la joven se tiro al piso y levanto sus piernas, recibiendo en el aire a Pepo para lanzarlo contra un muro, El delincuente grito de dolor al impactar con el concreto, demoliendo toda la infraestructura y recibiendo el peso de los ladrillos. "AAAAAAAhhh!!!!" Grito de dolor el malandro.

Fátima luego levanto con sus manos la enorme bola de hierro y se lo lanzo al ver que Pepo salía aun mas furioso de los escombros "Por todos los crímenes que has cometido y la humillación de Yunque pido perdón a mi señor por hacer mía la venganza" Dijo la joven furiosa a su adversario. el malandro recibió con su pecho su arma, destrozando sus costillas en solo ataque y quedando moribundo en el piso. "¡Maldita chiquilla mátame de una vez!¡Esta mierda duele!"

"¡No soy una asesina! Solo tu recibiste lo que te merecías por hacer sufrir cada inocente vida que se cruzo en tu  camino.¡Pero agradece al señor, ya que Yunque que conociste es tan fuerte como yo y el si te hubiese matado." Dijo Fátima a Pepo el cual quedo inconciente por el dolor, todos los criminales huyeron del lugar, mientras que Myson y Messi se levantaban después de la dura golpiza."Esto nos enseña compañero a que la próxima vez que esta flaca se meta en líos hay que dejarla pelear sola" Dijo el superior a su fiel amigo.

La joven al ver el camino despejado corrió hacia la puerta de su casa gritando por su familia. Al coger la manecilla se dio cuenta con horror de que estaba abierta, pero sufrió aun mas al ver todo el lugar carbonizado y hecho ruinas con los dos esqueletos quemados de una pareja arrojados sobre los escombros de un sofá. Fátima cayo al piso y hecho a llorar desconsoladamente al ver la terrible tragedia que ahora formaba parte de su vida.

Mientras tanto...

Loveless comenzaba abrir sus ojos y a despertar de fuerte anestesia, ella no sabia donde estaba pero su cuerpo estaba bastante adolorido "¡Mierda en donde estoy!" inmediatamente le contesto una voz seria y calmada "No puedes moverte, estas demasiado mal herida...deberás  guardar reposo hasta que te cures" Le decía Black Warrior mientras que revisaba sus anotaciones.

"¡Soy una mestiza!¡Estoy mezclada con sangre de demonio!¡Nosotros podemos regenerarnos sin ayuda de nadie!" Grito Loveless a su medico, en ese mismo instante intento levantarse de la cama, pero cayo de esta sufriendo por sus heridas. Black Warrior le levanto de su asiento y la recogió del piso y la acomodo suavemente luego le hizo beber una medicina."No eres una mestiza, pero si una señorita muy ingeniosa para poder manejar y crear estas armas que están muy pegadas al cuerpo"

"¡Cállate ángel caído! si  soy una mestiza!¡Así que no vengas con tonterías!" Dijo Loveless mas furiosa pero esta vez inmóvil por su sufrimiento."No lo digo por hacerte sufrir, si no por que analice tu sangre, si de verdad fueras mitad demonio tus células rojas hubieran devorado la transfusión de plasma, peor no lo hicieron" Le contesto Black Warrior calmadamente."No es necesario que me cuentes tus secretos, yo solo estoy aquí para curarte...ya cuando sanes podrás irte o quedarte"

"¡Escúchame ese es mi secreto!¡Nadie tenia que saberlo¡ así que a penas me recupere te  matarte!" Dijo la mujer mal herida. "Entonces será mejor que prepare de una vez los recibos de mis honorarios por curarte...¡Me debes un millón de dólares! y los quiero antes de que pases ese cuchillo por mi yugular, si no otro vendrá a cobrarte." Dijo Black Warrior el cual dejo la habitación de la paciente.

Al mismo tiempo en algún lugar de la gran ciudad...

Destroyer observaba como todo el caos y la destrucción avanzaban en medio de la oscuridad desde su helicóptero. Sakura era quien lo piloteaba y Kosen recibía un llamado del Gran Sacerdote Oscuro. "Señor al parecer tenemos la sospecha de que los Santificados del Vaticano están llegando a este territorio para encontrar a la joven"

El malvado líder le contesto "¡Entonces que diablos están haciendo! ¡Por que no matan a la joven de una buena vez!" Kosen le dijo "Estamos esperando ordenes de Destroyer al parecer el tiene un plan" Le dijo Kosen mientras que observaba a su compañero sentado en la patas del helicoptero. En ese momento el mestizo mencionado entro e hizo un llamado a todos.

"¡Escuchen chicos aquí nos bajamos!" Dijo Destroyer mientras que hacia aterrizar el helicóptero en la azotea de un edificio donde habían cuatro siluetas que esperaban encontrarse con ellos en la oscuridad de la noche.  

   

  

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